Dennys Eduardo Dubón Fernández, es un talentoso escritor de novelas nacido en Choloma, Cortés, el 9 de agosto del 1981. Actualmente tiene 40 años de edad y reside en la ciudad industrial de San Pedro Sula (SPS). Sus padres Olga Amparo Fernández y Eduardo Dubón Pérez, es por ello que sus obras literarias prefiere firmarlas únicamente con su segundo nombre.
(EL SOBERANO HN) tuvo la oportunidad de platicar de manera exclusiva con Dubón Fernández, quien aseguró ser una persona autentica, trabajadora y soñadora. El joven se desempeña como catedrático en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras y en el Centro Universitario Tecnológico (Ceutec/Unitec) en las carreras de administración de empresas y contaduría pública, respectivamente. También, trabaja en el periodismo deportivo como redactor para la revista “HonduSports”, ilustrada y en el programa de radio y televisión “La Controversia” como parte del staff de comentaristas.
Recalcó que, como máster en administración de empresas y docente de la misma área, procura ser un buen administrador de sus finanzas, aunque suponemos que tiene buenos ingresos económicos en los trabajos que realiza.
¿Es casado, tiene hijos, cómo se llaman?
Soy casado con María Recinos y por ahora no tenemos hijos
¿Cómo fue la niñez de Eduardo Dubón?
Relativamente tranquila en una zona céntrica de Choloma, tuve lo necesario para un niño: cariño de mis padres, comida y estudios. Nunca añoré lujos ni cosas materiales que no tuve. Mi espíritu soñador me decía que algún día crecería y alcanzaría lo que me propusiera.
¿De todas las actividades que realiza, si le tocará elegir una, con cuál se quedaría?
Me quedo con la de profesor porque me ayuda a crecer como persona conociendo a mis estudiantes.
¿Cómo y cuándo nace la pasión por escribir?
Desde muy niño me encantaron las letras, aunque fue hasta la universidad donde comencé con mis primeros relatos e historias que compartía con mis amigos. Luego por mis ocupaciones me alejé un poco de la escritura y solo leía. Fue a raíz del confinamiento a inicios del 2020 que me propuse finalizar al menos una de mis dos novelas que llevaba comenzadas desde hacía un par de años y logré publicar la primera a mediados de ese mismo año y la segunda en 2021. Actualmente estoy por finalizar y publicar la tercera que será el cierre de la saga que me propuse con mis novelas.
¿Cómo se llaman sus obras publicadas, en qué fechas se hicieron y sobre qué tratan?
EL LEGADO OCULTO (julio de 2020) y LAS DAGAS DEL SACRALIZADOR (febrero de 2021) que forman parte de una saga estilo suspenso que mezcla dos tramas de ficción contemporánea con historia hondureña de otras épocas, en el caso de El Legado Oculto relacionada con la Conquista de los españoles y la Civilización Maya, y Las Dagas Del Sacralizador es acerca de la vida de Francisco Morazán, José Trinidad Cabañas y la Batalla de La Trinidad.
En ambas novelas pretendo resaltar hechos, lugares y personajes históricos de nuestro país y entremezclarlos con narrativa de ficción contemporánea de detectives, misterio y asesinatos de corte thriller histórico por lo que se convierten en tramas de entretenimiento al lector y a la vez de aporte de nuestra historia, riqueza cultural e identidad nacional basándose en investigación y documentación de la historia de Honduras.
¿Qué obras están en mente y cuáles ya se iniciaron?
Actualmente estoy en la etapa final de mi tercera novela EL LINAJE DE LOS CACIQUES que aborda un poco la vida de tres de los principales caciques de nuestra historia y mezcla una trama de investigación del origen de supuestos descendientes directos de estos a través de modificaciones genéticas. Siempre usando el estilo de investigación detectivesca, misterio y conspiraciones que abordan historia y folclor de nuestro país.
¿Qué hace Eduardo Dubón en sus tiempos libres?
Hago ejercicio, caminata de montaña, escribo cuando puedo, veo documentales en Internet sobre temas interesantes, redacto deportes y viajo a lugares interesantes junto a mi esposa. De cada lugar que visito procuro obtener algo de su historia para incluirlo en mis novelas. Es algo que disfruto mucho.
¿Es bien remunerado en este país dedicarse a la literatura?
Para nada. De hecho, así como yo edito y publico de manera independiente mis libros no queda ganancia económica, pero sí la satisfacción de saber que hay gente que se interesa por leer mis historias.
¿El ser escritor le abrió puertas nacional e internacionalmente?
Por ahora ninguna.
¿A qué países viajó gracias a la escritura?
A ninguno gracias a la escritura; pero he visitado Estados Unidos (EEUU), Guatemala y El Salvador, de todos ellos he procurado explorar lo que he podido y plasmar algunas vivencias en mis novelas.
¿Cuál es su premio soñado?
Ninguno. No anhelo premios, pero sí que la gente se interese por la literatura nacional.
¿A cuáles escritores hondureños conoció y a quiénes admira?
Conozco a muchos y también los admiro, pero si me pregunta sobre los clásicos de nuestra literatura incluiría a tres: Froylán Turcios, Ramón Amaya Amador y Jorge Montenegro.
Finalmente, Dubón Fernández nos contó sobre un desliz que tuvo en una iglesia en el interior del país, el joven cayó de uno de los escalones y quedó con su cabeza hacia arriba mirando el campanario, acontecimiento que sirvió de inspiración para escribir un pasaje de uno de sus libros. Los lugares históricos del país le hacen crear tantas ideas que luego se encarga de recrear en relatos que forman parte de sus libros y los traslada a la gente con el fin de que al menos se puedan dar cuenta que en Honduras hay mucha riqueza que se puede explorar y dar a conocer al mundo.
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