¿Un beneficio o una espada de Damocles en el cuello de la clase obrera?
En los últimos días con la llegada del nuevo gobierno que preside Xiomara Castro de Zelaya, se puso de moda esa temática y como era de esperarse existen posiciones en contra como el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) porque consideran que su derogación puede traer consecuencias nocivas para el país, ya que existen problemas serios de desempleo y con la medida creen que se “engrosaría” aún más las filas de personas desocupadas.
Sin embargo, las Centrales Obreras, al igual que la clase trabajadora ve con buenos ojos la derogación de dicha ley que según ellos solo vino a violentar las conquistas laborales que iniciaron a partir de la famosa "Huelga de 1954".
Aunque la industria argumenta que la "Ley de Trabajo por Hora" se aprobó en 2014, con el propósito de apoyar a parte de la población principalmente a los jóvenes que deseaban estudiar y trabajar al mismo tiempo. Lo cierto es que con eso se agudizó la frustración de ese sector, "ya que no miran la luz al final del túnel", su futuro cada vez es más incierto y sus esperanzas agonizan. Es por eso que se incrementa el éxodo de personas que buscan un mejor futuro a través del "sueño americano".
Hoy en día, las empresas contratan bajo esa modalidad y se amparan en ello para no pagar derechos laborales. El empleado es un ser humano que come, duerme, ríe, llora y siente, pero que esos sentimientos no puede expresarlos porque vivimos bajo un modelo neoliberal y en un sistema opresor, injusto, deshumanizante y violento, al que no se le puede demandar nada, de lo contrario, está lista la espada para “cortar la cabeza” de quien consideren un peligro para sus intereses.
(EL SOBERANO HN) propone a las partes involucradas sentarse lo más pronto posible y así buscar una solución favorable para todos. Además, invita a los empresarios que depongan sus intereses mezquinos que impiden el desarrollo del país.
Comments